LA CULTURA NASCA
Su descubridor científico es el arqueólogo alemán Federico Max Uhle. Se desarrolló en la costa del departamento de Ica, teniendo como centro principal a la ciudad de Cahuachi, en el valle del río Grande. Fue una sociedad de base eminentemente agrícola, a pesar de ubicarse en una de las zonas más desérticas de la costa peruana. Para poder producir sus alimentos aprovechaban al máximo el caudal de los ríos en verano, utilizando reservorios y canales. En los meses de estiaje utilizaban las aguas de la napa freática, gracias a una gran red de acueductos subterráneos conocidos como puquios.
LA CULTURA NASCA (200 - 600 d.C.)
Su descubridor científico
es el arqueólogo alemán Federico Max Uhle. Se desarrolló en la costa
del departamento de Ica, teniendo como centro principal a la ciudad de
Cahuachi, en el valle del río Grande.
Fue una sociedad de base agrícola, a pesar de ubicarse en una de las zonas más desérticas de la costa peruana. Para poder producir sus alimentos aprovechaban al máximo el caudal de los ríos en verano, utilizando reservorios y canales. En los meses de estiaje utilizaban las aguas de la napa freática, gracias a una gran red de acueductos subterráneos conocidos como puquios.
La masa campesina estaba al servicio de una aristocracia guerrera y teocrática que residía en hermosos centros ceremoniales de forma piramidal. Ejemplos de su arquitectura en adobe las tenemos en las ruinas de Kahuachi, la Tinguiña, Tambo Viejo, Huaca Dos Palmos y Chaviña. También construían con gruesos troncos de Huarango como se muestra en La Estaquería.
Fue una sociedad de base agrícola, a pesar de ubicarse en una de las zonas más desérticas de la costa peruana. Para poder producir sus alimentos aprovechaban al máximo el caudal de los ríos en verano, utilizando reservorios y canales. En los meses de estiaje utilizaban las aguas de la napa freática, gracias a una gran red de acueductos subterráneos conocidos como puquios.
La masa campesina estaba al servicio de una aristocracia guerrera y teocrática que residía en hermosos centros ceremoniales de forma piramidal. Ejemplos de su arquitectura en adobe las tenemos en las ruinas de Kahuachi, la Tinguiña, Tambo Viejo, Huaca Dos Palmos y Chaviña. También construían con gruesos troncos de Huarango como se muestra en La Estaquería.
La élite nasquense gobernaba en nombre de los dioses,
principalmente Boto (la orca) y Kon (el felino). En honor a estos
dioses se realizaban complejos rituales y danzas en las Pampas de San
José, Ingenio y Palpa. Son famosos los geoglifos gigantes y líneas
grabados en el suelo con surcos a manera de caminos ceremoniales. Esto
fue sostenido por su descubridor Toribio Mejía Xesspe en 1927. Expertos
como Johan Reinard, Giusseppe Orificci y Johny Isla sostienen que en
aquellas pampas se realizaban rituales y ofrendas para congraciarse con
los dioses del cielo, el agua y la tierra. No se ha descartado que
algunas líneas estén relacionadas con los movimientos astronómicos como
sostenían Paul Kosok y María Reiche.
La cultura Nasca pertenece al Intemedio Temprano,
también llamado periodo de los Maestros Artesanos. Como herederos de los
Paracas Necrópolis, destacaron sus tejedores que hacían bellas piezas
de algodón, lana y plumas. Pero donde fueron inigualables es en la
cerámica pictórica. Elaboraron hermosos cantaros, vasijas y tambores con
una fina decoración estilizada geométricamente y muy policromada. Sus
artesanos más barrocos sentían un “horror al vacío” por lo que pintaban
todas las piezas con motivos naturalistas y abstractos.Esta mística y
belicosa civilización sucumbió ante el avance del Imperio Wari (siglo
VII d.C.).